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Santiago City fue una telenovela chilena, producida y emitida por Mega en 1997. Escrita por Jorge Abelleira y dirigida por Helvio Soto y su hijo Hugo Soto Orellana.

Protagonizada por Ana María Gazmuri, Juan Falcón y Sonia Mena. Con las actuaciones estelares de Sonia Viveros, Jaime Azócar y Pablo Krögh.

Los 5 puntos de rating que obtuvo -frente a los más de 30 de Playa Salvaje de Canal 13 y los 20 de Tic Tac en TVN- hicieron que fuera abruptamente cortada, luego de 17 capítulos. Se exhibió entre el 23 de julio y el 14 de agosto de 1997. Mega anunció que las grabaciones continuarían y que se transmitiría completa en un horario no estelar, pero esta promesa jamás se cumplió.

Argumento

La ciudad de Santiago se presenta imponente a Gloria (Ana María Gazmuri), una muchacha recién llegada de Valparaíso, pero ella tiene una personalidad muy fuerte, y sabe que la ciudad no logrará vencerla. Ella está decidida y viene dispuesta a triunfar. Lo primero que hace en la jungla de cemento es visitar una agencia de empleos. Andrés (Juan Falcón) está en ese mismo lugar, también viene de provincia y busca la forma de poder pagar sus estudios de pedagogía y tener un lugar para vivir. Las cosas no son tan fáciles para los jóvenes provincianos. La ciudad es grande, es dinámica pero también es ajena.

Gloria, orgullosa como ella sabe ser, siente que el puesto de relacionadora pública es seguro para ella, sin embargo, lo mejor que logra conseguir es un puesto como empleada doméstica en la casa de una solitaria millonaria, Victoria Valderrama (Sonia Mena). A pesar de la humillación que siente, decide aceptar.

¿Qué le depara el destino a Andrés? La ciudad fría e impersonal le tiene varias sorpresas reservadas. Gloria llega a la casa de Victoria, la elegante vivienda se defiende del paso del tiempo y del progreso que termina por arrasar todo. Lo que antes era un barrio de casas señoriales hoy, está rodeado de edificios. Ya nada es lo mismo, la calle se ha llenado de gente de vida intensa y agitada. Lo que perturba enormemente a Victoria.

La millonaria tiene alrededor de cincuenta, pero los años no han logrado destruir su altiva belleza ni sus modales severos y autoritarios. Vive acompañada sólo por el personal de servicio. Ella se lamenta que el barrio haya sido destruido, pero se niega a abandonarlo.

Ambas mujeres, Gloria y Victoria, son altaneras, pero la joven también es audaz y eso la lleva a enfrentarse rápidamente con su patrona. Un acto de insolencia imperdonable provoca al principio la ira de la señora, pero pronto se da cuenta de la capacidad de la muchacha y la insolencia es considerada valentía. Entonces no sólo la deja quedarse en la casa sino que la asciende y pone a cargo de toda la servidumbre: el mayordomo y el chofer.

Una gran corte gira en torno a la millonaria. Arturo (Gonzalo Palta), es su fiel amigo desde la infancia. Tanto, que se ha convertido en administrador de sus capitales. También está Miguel (Pablo Krögh), su sobrino y protegido que es casado con Beatriz (Sonia Viveros). Ella es mayor que su marido, es ingeniera comercial y no pierde de vista la fortuna de su tía política. Entre el personal de servicio destacan Lucy (Josefina Velasco) y Dolores (Carolina Jerez), dos jóvenes y bonita empleadas, Francisco (Eduardo Fuentes), un sensual y pícaro jardinero que desea ser cantante, una huraña cocinera y los serios Demetrio (Mario Lorca) y Rebeca (Angela Escamez).

Andrés ha sido contratado como ayudante del conserje en el edificio contiguo, donde la vida es bastante diferente a la de la señora Victoria. Esta mujer guarda un gran secreto, que se relaciona con Andrés y Gloria sabrá utilizar para su beneficio, sin embargo, no cuenta con que Geraldine (Pía Salas), su mejor amiga, que también tiene interés en el apuesto provinciano.

Infinidad de historias se desarrollan en ese mundo de altura. Están Gala (Carmen Burgos), Adrián (Andrés Gómez) y Paulo (Nicolás Zárate), los tres hijos de Daniel (Luis Wigdorsky), un médico que tratan de escapar de la férrea disciplina que les impone su padre; Nancy (Paola Camaggi), una estupenda estudiante que cultiva su cuerpo trotando por el barrio y sus simpáticos abuelos: Matilde (María Cánepa) y Rigoberto (César Arredondo) que la cuidan y regalonean desde que murieron sus padres; Javier (Eduardo Baldani) un profesional de mediana edad reacio al matrimonio y su hija Olivia (Mariela Acevedo) que le busca novia, ellos acaban de llegar de Estados Unidos; Natalia (Irene Llanos), una bella chica que luce sus atributos causando la ira de Pepe (Tennyson Ferrada), su padre y la admiración de sus vecinos; y Luis Manuel (Alberto Zeiss) y Víctor (Christian González), los jóvenes emprendedores que han instalado una oficina de servicios telefónicos que atiende todo tipo de consulta, desde sentimentales hasta académicas.

Historias románticas y graciosas se mezclan en el edificio y se prolongan en el pub al que concurren los vecinos. Este lugar es propiedad de Dionisio (Gabriel Prieto), un trotamundos que viene llegando del Caribe, cuya principal preocupación son unos dioses que le ayudan a descifrar el destino de los hombres. Junto a él, trabaja un mozo bastante especial que se convierte en la atracción, gracias a su alegre personalidad.

Algo determinante en la historia es el descubrimiento que Gloria hace en relación al pasado de su patrona: Veinticinco años atrás estuvo embarazada. El autoritario padre de Victoria ordenó que este hijo no deseado fuera entregado a unos campesinos en el sur.

Esta es la oportunidad que Gloria esperaba. Ella encontrará al hijo de Victoria y eso le asegurará definitivamente el bienestar económico que ella tanto busca.

A través de su amiga Geraldine, Gloria conoce a Arévalo (Fernando Gallardo), un gracioso y descarado detective a quién se le encarga la búsqueda, pero ante la imposibilidad de llevar a cabo su misión, éste propone un plan en que estará incluido Andrés.

Elenco

Trivia

  • En una época en que la tendencia de las teleseries chilenas era el folclorismo y costumbrismo, con muchos exteriores e historias ambientadas en pequeñas localidades de regiones, el proyecto de hacer una teleserie ambientada en Santiago le pareció descabellado a muchos. Santiago City fue muy criticado por mostrar una ciudad "en la que nadie quiere vivir", como consignó un comentarista de televisión de la época. Una de las causas que explicarían el rotundo fracaso de la teleserie es la forma en que mostraba Santiago: como una ciudad sucia, llena de ruido y de edificios en construcción, de acuerdo al estilo de su director. Mientras la teleserie de la competencia (Playa Salvaje) mostraba playas, sol y trajes de baño en Iquique.
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